El camino de la descarbonización

Dentro de su compromiso con la búsqueda de la neutralidad carbónica, Galp ha anunciado recientemente un plan estratégico para la descarbonización gradual de su cartera. Para ello, se ha fijado como objetivo la reducción de la intensidad carbónica de sus actividades en al menos un 15 % hasta 2030

Lograr el equilibrio entre satisfacer las necesidades energéticas de la sociedad y minimizar la intensidad carbónica de las actividades necesarias para satisfacer dicha demanda no es tarea fácil, pero sí es un propósito esencial para Galp con el que está comprometida activamente.

Con ese objetivo en el horizonte, Galp traza así un camino hacia la neutralidad carbónica, en el cual uno de los pasos más decisivos es el plan estratégico recientemente anunciado por la compañía, que no busca otra cosa que descarbonizar gradualmente su cartera de negocio. En él, Galp establece unos objetivos a largo plazo que buscan reducir la intensidad carbónica, alineando su cartera con la visión sobre la neutralidad carbónica en Europa hasta 2050 y comprometiéndose así a reducir la intensidad carbónica de sus actividades en al menos un 15 % hasta 2030 (con 2017 como año de referencia).

Con un amplio bagaje en materia de ESG (Environmental, Social and Governance), reconocido de manera unánime por las principales instituciones en materia de sostenibilidad, Galp se precia de disponer de una cartera con una serie de activos con un elevado potencial, destacando dentro del sector por su alta competitividad y su actuación medioambiental de referencia.

Por otro lado, Galp considera que ese compromiso férreo con la sostenibilidad debe no solo ser declarado sino también medido y confirmado de manera concreta, motivo por el cual la empresa se compromete igualmente a monitorizar su huella de carbono de manera regular y sistemática. A efectos del cálculo de la intensidad carbónica, se ha adoptado una metodología, validada por las instituciones internacionales competentes, que considera un enfoque del ciclo de vida «del pozo a la rueda», incorporando todas las emisiones referentes a la producción, tratamiento y entrega de energía a los consumidores finales de Galp, así como su uso final. De acuerdo con la metodología analizada, la intensidad carbónica de Galp en 2017 fue de 78 gCO2e/MJ.