Considerado el mayor Parque de Ciencia y Tecnología de Portugal, el Taguspark aúna emprendimiento, investigación y universidad en un único espacio incorporándolos a su ADN. Garantizar que los trabajadores puedan experimentar una “experiencia del siglo XXI” es el gran foco de la administración en este polo empresarial. Más específicamente, se mezcla arte, arquitectura contemporánea y condiciones laborales que ofrecen bienestar y calidad en el trabajo. Cabe recordar que, actualmente, son cerca de 16.000 las personas que trabajan y utilizan el parque, con 150 empresas ya instaladas.
“El civismo es un factor diferenciador y algo que consideramos muy importante para el día a día de las personas que pasan por aquí todos los días”, asegura Eduardo Baptista Correia. El camino hacia un parque cada vez más cívico comenzó a diseñarse hace ya tres años: “Actualmente podemos ver colillas y papeles por el suelo, coches mal aparcados…”, explica el CEO de Taguspark. La preocupación por el civismo incluye la forma cómo los residuos generados por el propio parque (colillas, por ejemplo) integran procesos productivos, pensados y llevados a cabo por empresas de la misma zona industrial.
Otra de las áreas de actuación se centra en el aspecto de la dignidad laboral, campo en el cual se han implementado ya algunas medidas innovadoras: todos los trabajadores que prestan servicios a Taguspark y que perciban el salario mínimo pasarán a recibir un mínimo de novecientos euros mensuales. “Para nosotros, este es un elemento de civismo absolutamente imprescindible”, comenta Baptista Correia.
Más recientemente, Taguspark ha decidido apostar por el “civismo energético”, con la finalidad última de convertir el parque en un espacio más ecológico y más verde, a través de una planta termosolar. “Estamos avanzando en un proyecto muy sólido y pionero en Portugal, gracias al uso de paneles fotovoltaicos, con el objetivo de ser cada vez menos dependientes de la red y cada vez menos contaminantes. Para nosotros es absolutamente estratégico situarnos en primera línea en lo que a estas cuestiones se refiere”, destaca el CEO de Taguspark
La planta termosolar con la que contará el Taguspark tendrá una capacidad para producir anualmente más de 1 GWh de energía eléctrica. El proyecto ha sido desarrollado en colaboración con EI - Energia Independente, la nueva empresa de Galp para autoconsumo solar, y tiene previsto instalar 1.500 paneles solares de la empresa tecnológica LG en siete edificios del Centro Empresarial de Innovación y Tecnología del parque industrial, con una potencia total de instalación superior a 700 kWp.
Se estima que el 97 % de la energía producida vaya destinada a autoconsumo en las instalaciones del Taguspark, lo que permitirá a este polo empresarial reducir su dependencia de la red eléctrica en un 23 % y reducir así las emisiones en 251 toneladas de CO2 al año.
“Este proyecto tiene un significado muy especial para EI, ya que nos permite confirmar que toda la tecnología que estamos desarrollando, a la que llamamos Eitech2perform, nos permite no solo ser más eficientes y rápidos, sino también mostrarnos que está igualmente preparada para adoptar soluciones más complexas y exigentes, como es el caso del Taguspark”, explica el representante de EI.
El proyecto de EI incluye la instalación de 1.500 paneles solares
Eitech2perform es una tecnología propia, desarrollada por EI, que combina una serie de capas de información (archivo, gestión, imágenes por satélite, datos socioeconómicos, clasificación de los autoconsumidores y cálculo de la rentabilidad), lo que permite diseñar de forma eficiente la propuesta que mejor se adapta a las necesidades de cada cliente.
“El proyecto del Taguspark viene a confirmar la respuesta que estamos logrando dar a las demandas de nuestros clientes más exigentes”, comenta Ignacio Madrid, CEO de Energia Independente.