Carga eléctrica inteligente gana el premio Colmeia

La eficiencia energética y su aplicación en la vida cotidiana de quienes viven o trabajan en Matosinhos fue el gran ganador de los Premios Colmeia, el programa de innovación colaborativa para la comunidad desarrollado por Galp y el municipio de Matosinhos. El reto lanzado permitió la presentación de proyectos en los ámbitos de la transición energética, la puesta en valor del patrimonio y la reducción de la pobreza energética.

El concurso se dividió en dos iniciativas: la IN.COMUNIDADE, dirigida a proyectos presentados por la comunidad local; y el programa IN.STARTUP, dirigido a startups portuguesas y extranjeras. Además, recibió 78 propuestas innovadoras a nivel ambiental las cuales también demostraron ser innovadoras a nivel económico. Todo para, según Manuel Andrade, responsable de Open Innovation, "mejorar la vida de la comunidad" y "el resultado fue increíble".

Con cinco proyectos finalistas en IN.STARTUP, el primer premio, dotado con 50.000 euros, recayó en Eavy Charging. La idea fue desarrollada en Alemania, por Paulo Cruz, país en el que vive desde hace 10 años, junto con Portugal, donde vive otro socio y colega de desarrollo de la empresa. Se presentaron soluciones para permitir la carga rápida y simultánea de varios vehículos eléctricos aparcados en una misma zona del parque con un solo cargador. "A finales de 2024, implementaremos un sistema de carga eléctrica para diez coches en un aparcamiento público en el centro de Matosinhos con tarifas muy económicas", afirma el responsable de la startup. El proyecto es especialmente importante para "los vecinos sin parking propio y que tienen que cargar sus coches en la calle".

Em segundo lugar, com um prémio de 15 mil euros, ficou a Windcredible que está focada no desenvolvimento e produção de turbinas eólicas de eixo vertical. Duas turbinas, com dois metros e meio de altura e com o peso de 50 quilos cada uma, serão colocadas em bairros da cidade aproveitado o vento para produzir energia. “A Galp permite-nos executar um projeto pioneiro que pode mudar a forma de produzir energia localmente e a custos muito mais baixos”, disse Filipe Batispta, um dos responsáveis pela pequena empresa.

O terceiro lugar, com um prémio de 10 mil euros, foi atribuído à Kumulus, uma startup francesa que apresentou um sistema que produz água potável a partir da humidade do ar. Pierre-Alexis Daufresne, autor do projeto, deu como exemplo das “infinitas possibilidades” de reaproveitamento da água os eventos desportivos. “Provas desportivas e espaços culturais são locais onde podem ser colocadas as máquinas de distribuição de água com sucesso”, frisou.

En segundo lugar, con un premio de 15 mil euros, quedó Windcredible, con un proyecto centrado en el desarrollo y producción de aerogeneradores de eje vertical. Dos turbinas, de dos metros y medio de altura y 50 kilogramos de peso cada una se colocarán en barrios de la ciudad utilizando el viento para producir energía. "Galp nos permite ejecutar un proyecto pionero que puede cambiar la forma de producir energía a nivel local y a un coste mucho más bajo", indicaba Filipe Batista, uno de los responsables de la pequeña empresa.

El tercer puesto, con un premio de 10.000 euros, fue para Kumulus, una startup francesa que presentó un sistema capaz de producir agua potable a partir de la humedad del aire. Pierre-Alexis Daufresne, autor del proyecto, puso como ejemplo los eventos deportivos para hablar de las "infinitas posibilidades" que ofrecen en términos de reutilización del agua. "Los eventos deportivos y los espacios culturales son lugares donde se pueden colocar con éxito máquinas de distribución de agua", subrayaba.

Hubo otros proyectos que no obtuvieron premio, pero sí numerosos aplausos. Es el caso del proyecto presentado por Bandora, una plataforma de IA (inteligencia artificial) que recopila datos generados por los edificios y los utiliza para implementar soluciones en tiempo real, ayudando así a reducir el consumo energético hasta en un 40%. O el proyecto de Voltaware, una plataforma de análisis de información y gestión del consumo eléctrico en el hogar. "Se pueden mantener, por ejemplo, temperaturas fijas en edificios públicos, asegurando una reducción de los costes", explica Márcia Pereira, de Bandora. Con residencia en Londres, el francés François Gruber-Magitot, responsable de la candidatura de Voltaware, quiso elogiar la importancia del programa Hive en la formación de la población. "Este concurso es muy importante porque, en muchos sentidos, permite que las personas aprendan más sobre educación financiera", comentaba.

Comunidad activa en la transición energética

En el capítulo, IN. COMUNIDAD, los proyectos contaron con la participación activa de los vecinos en el proceso de innovación y transición energética. Los participantes pudieron desarrollar sus ideas innovadoras, recibir consejos de expertos y acceder a recursos para convertir sus ideas en realidad. Y al final, llegaron tres proyectos.

El proyecto Suntech Workflow se alzó con el primer puesto y con un premio de 12.500 euros, que utilizó para desarrollar una solución que analiza y sugiere optimizaciones para empresas instaladoras de energía solar. "Este concurso es el lugar adecuado para desarrollar una idea y encontrar la solución a un problema", indicaba Mohsen Motamedi, director del proyecto. Nacido en Irán, estudiante del Instituto Superior Técnico y residente en Lisboa, Mohsen afirma que Galp ha permitido crear "una sinergia entre los proyectos y su ejecución".

En segundo lugar, con una ayuda económica de 7.500 euros, se situó el proyecto "Bairro", centrado en la instalación de paneles fotovoltaicos para el suministro de energía con el fin de mitigar la pobreza energética en uno de los barrios más necesitados de Matosinhos. "Con la creación de una unidad fotovoltaica, la producción revertirá en entidades sociales", justificaba Pedro Vieira, empleado de Galp y autor del proyecto galardonado.

Con un premio de 5.000 euros, en 3.ª posición quedó "Energia com vida", un sistema de camas elásticas piezoeléctricas creado para convertir la energía cinética generada por las personas en energía eléctrica y distribuirla allí donde se necesite. João Lopes, autor de la iniciativa, reveló que los trampolines pueden instalarse en "discotecas, gimnasios, fiestas populares y espacios infantiles" y activarse con "saltos, bailes o gimnasia". "Donde hay movimiento, hay energía", dijo.

En el acto final, celebrado en el Ayuntamiento de Matosinhos, donde tuvo lugar la votación y la entrega de los premios a los ganadores, Marta Pontes, concejala de Economía, Turismo e Internacionalización de ese municipio, aseveró que "más que un proyecto, Colmeia es un proceso".

Orgullosa de la envergadura del trabajo desarrollado y de la conexión entre el sector público y privado, y la comunidad, Marta Pontes quiso destacar que, a lo largo de este proceso, los concursantes se han interesado por la "historia, las raíces, la cultura, la identidad y las problemáticas de nuestra comunidad".