Retos de la descarbonización de la economía

La Unión Europea está liderando un camino recorrido de diferentes formas por otras regiones del mundo, pero con el mismo objetivo: alcanzar las cero emisiones de gases de efecto invernadero para 2050

El cambio climático ya está en la agenda de ciudadanos, empresas y gobiernos en la actualidad, y el número de países y empresas que han fijado límites a tiempo para lograr dicho objetivo sigue creciendo. Pero los desafíos son grandes si queremos lograr el objetivo establecido en el Acuerdo de París.

LA BÚSQUEDA DE ENERGÍA SIGUE CRECIENDO

La población mundial continúa aumentando y sus patrones de calidad de vida siguen creciendo, contribuyendo a intensificar la búsqueda de energía y, con ello, el uso de los recursos. Pero es necesario descarbonizar para asegurar la sostenibilidad ambiental de la Terra y el futuro de la vida en nuestro planeta. Es necesario producir y usar la energía de forma diferente para reducir el impacto de la actividad humana en la naturaleza. El proceso, que ya se está produciendo y que ciertamente supone uno de los mayores retos a los que la humanidad se enfrenta, fue uno de los temas discutidos en la última edición de Open Days, de Galp.

Susan Farrel, vicepresidenta de IHS Markit, una de las ponentes, señaló inicialmente que el uso de la energía todavía representa el 75% de las emisiones de gases de efecto invernadero, mientras que el porcentaje restante corresponde a otras actividades como la agricultura. También explicó que "China es el principal país emisor", y agregó que Estados Unidos, India, la Unión Europea (UE) y el resto de países les siguen en la lista.

La UE está liderando el camino de la descarbonización, estableciendo diferentes caminos y mecanismos, como afirma el analista de Wood Mackenzie Jonathan Sultoon, y añade que existen diferentes actitudes entre las grandes regiones de nuestro planeta, explicadas en parte por su disponibilidad de recursos energéticos. Este es uno de los factores que justifica, por ejemplo, la diferencia de actitud de "China, que todavía los tiene, con Estados Unidos, que carecía de muchos de ellos". El país se ha centrado principalmente en las tecnologías de captura y almacenamiento de carbono, mientras que los países de Asia y Oceanía, liderados por Australia, están desarrollando tecnologías de producción de hidrógeno verde, con Japón y Corea del Sur "apuntando más al sector industrial". Cuando se trata del uso de células de hidrógeno, están más avanzados que Europa, que se centra más en los vehículos eléctricos", explicaba Jonathan Sultoon.

PRESIÓN FINANCIERA

Rui Costa Neto, profesor del Instituto Superior de Ingeniería de Lisboa y de la Universidad Lusófona, argumentó que esta es la oportunidad correcta para que Europa cambie su paradigma energético basado en el petróleo y el gas, y para que la economía europea dependa únicamente de él. "Tenemos que producir nuestra propia energía", indica, y añade que "la mejor y más eficiente manera de hacerlo es volver a cómo la venimos produciendo desde los años 20 del siglo pasado, cuando la electrólisis del agua se utilizaba para generar hidrógeno verde, con el fin de abastecer a las diversas industrias". Para este profesor, "pasar a la electrólisis significa autosuficiencia y capacidad competitiva en términos económicos".

Susan Farrel y Sabrina Cescolini, gerente de Servicios de Sostenibilidad, Salud Ambiental y Regulación de Intertek, señalan que la presión del sector financiero ha sido el principal vector de la transición energética, con un gran impacto en la evolución de las tecnologías de descarbonización. Y "será un gran motor, junto con las empresas, para que estas se involucren en soluciones", comenta esta última.
¿Y cuáles serán los principales catalizadores de la descarbonización? Obviamente, existen respuestas para esto, como la intervención gubernamental, la regulación y la reducción de las ayudas a ciertas actividades o industrias con alto consumo de energía primaria. Además, la presión pública juega un papel importante, como señala Sabrina Cescolini, así como la presión que están ejerciendo las compañías de seguros en beneficio de la transición energética, a causa de los crecientes riesgos derivados de los fenómenos meteorológicos extremos.

PRINCIPALES TECNOLOGÍAS DEL CAMBIO

Según Jonathan Sultoon, las tecnologías que contribuirán con más éxito a la descarbonización de la economía serán la captura y el almacenamiento de carbono, y las relacionadas con el transporte, es decir, las tecnologías renovables para la producción de hidrógeno verde y la movilidad eléctrica. También incluyó en el mix la energía nuclear, "porque juega un papel importante en las economías de Japón, Corea del Sur y China, que tendrán que invertir en este sector para alcanzar las emisiones cero".

Para Sabrina Cescolini, existen grandes diferencias entre las pequeñas y grandes empresas a la hora de prepararse para la transición energética. "El proceso es difícil y complicado y puede desalentar a algunas de las primeras", indica, sugiriendo que "debería comenzarse por medir las emisiones de cada empresa antes de establecer estándares y de desarrollar guías de cambio". En cuanto a las grandes empresas, "estas ya son capaces de reunir la información necesaria, fijarse objetivos e incluso alcanzarlos". Pero Sabrina Cescolini argumenta que siempre necesitan comprobar su actividad para reducir el riesgo y el impacto público, entre otras cosas porque son miradas con lupa. Añade que podrían desempeñar un papel aún más importante en la descarbonización si, con su influencia, consiguen implicar a sus socios en el proceso.