Energía, sociedad y tecnología a debate

La transición energética en curso se basa en tres pilares principales y su interacción fue analizada en la conferencia Portugal Energy, promovida por la Asociación Portuguesa de la Energía, la cual contó con el apoyo y la presencia de Galp, entre otros agentes del sector

Vivimos tiempos de gran transformación en el sector energético. La transición de los combustibles fósiles a las energías “limpias” es imprescindible para lograr la ansiada neutralidad carbónica en 2050 y el mayor objetivo de lucha contra el cambio climático. Pero no sin algunos dolores de cabeza. La enorme inversión en innovación y tecnología es una de ellas, la cual ha propiciado una rápida transición entre los países que firmaron en 2015 el Acuerdo de París, con el fin de reducir su huella ambiental de “gases de efecto invernadero”. Entre medio, tenemos que hacer frente a la crisis energética actual, a la que ha contribuido el creciente consumo de energía (en las últimas tres décadas ha aumentado en más del 60%), la pandemia y la guerra en Ucrania. Estos factores han expuesto debilidades como la incertidumbre de los precios y la seguridad del suministro, apelando a la urgencia de acelerar esta transición en el mundo.

¿A qué retos nos enfrentamos? ¿Qué relación hay entre innovación tecnológica y descarbonización? ¿Cuál es el papel de las empresas en el sector? Estos y otros temas fueron discutidos en la Conferencia de Energía de Portugal, una iniciativa de la Asociación Portuguesa de Energía (EPA) que volvió, a finales de noviembre, a sus ediciones presenciales con un lleno total en la sala Almada Negreiros del Centro Cultural de Belém.

EUROPA A LA VANGUARDIA

La sesión de apertura corrió a cargo del Secretario de Estado de Medio Ambiente y Energía, João Galamba, quien aseguró que “Portugal está a la vanguardia, con el gobierno comprometido con acelerar la transición energética”, manteniendo y fortaleciendo el enfoque sobre las energías renovables, así como en el desarrollo del hidrógeno y el biometano (gas a partir del biogás), que se cree que son elementos transformadores de cara al futuro.

João Galamba destacó la entrega portuguesa en la transición energética, a través del enfoque en las energías renovables y el desarrollo del hidrógeno y el biometano

El primero de los temas analizados fue la sostenibilidad ambiental y social del sector energético, enmarcado en el Wytse Kaastra, Sustainability Services Europe Lead de Accenture. Según este especialista, “estamos viviendo tiempos de aliados energéticos sin precedentes, con muchas implicaciones para nuestra economía, por lo que necesitamos ser más resilientes e independientes, garantizando la seguridad en los suministros. La buena noticia es que Europa está muy avanzada en materia de energías renovables; de hecho, ya ha realizado sus inversiones y la tecnología ya existe, por lo que ahora basta con aumentar su producción para que resulte más barata. Todas las piezas del rompecabezas están sobre la mesa, pero todavía hay mucho trabajo por hacer”. Posteriormente, le siguió el panel sobre innovación tecnológica y descarbonización, que trató sobre gases renovables, hidrógeno, biocombustibles y métodos de almacenamiento, entre otros.

INDEPENDENCIA ES LA PALABRA CLAVE

João Bernardo, máximo responsable de la Dirección General de Energía y Geología, presentó el tercer panel sobre desafíos estratégicos de las empresas del sector. Esbozó una visión general del recorrido de la transición energética desde la década de 1970 y sus antecedentes, así como del papel que juega Europa en el liderazgo de la descarbonización del planeta. “Europa tiene todo el interés en esta transición, no solo por lograr ser más independiente, sino también por las oportunidades de empleo cualificado que ofrece”, afirmaba el especialista, quien también señaló la importancia de que los Estados miembros deban pensar en estrategias para no seguir dependiendo de otros países de cara al suministro de materiales críticos. Para ello, dio el ejemplo del neodimio y otros materiales, con el objeto de apoyar su desarrollo a nivel industrial.

El CEO de Galp Destacó una vez más la necesidad de descarbonizar rápidamente el futuro

El tercer y último panel, sobre los retos estratégicos de las empresas energéticas, fue aportado por el CEO de EDP, REN y Galp. Según Andy Brown, Galp sabe que, como empresa energética, tiene la responsabilidad de garantizar que la transición energética sea gestionada de manera responsable, inclusiva y sostenible. En este sentido, ha trabajado para garantizar el suministro de combustibles y energía tradicionales de la forma más sostenible posible, al tiempo que se ha centrado en remodelar la cartera, centrándose en las energías renovables, los combustibles sostenibles como los biocombustibles y el hidrógeno, y en componentes esenciales como el litio para la cadena de valor de las baterías. La sociedad, el gobierno y las empresas – concluye el CEO de Galp – “necesitan trabajar juntos en la implementación de la transición energética. Todos tenemos que desempeñar nuestro papel en esta transición para mantener nuestras economías operativas hoy, pero también para descarbonizar rápidamente nuestro futuro para cuidar de nuestro planeta”.